Buscando la paz en Chiapas

Encuentro EZLN - Sociedad Civil

por SIPAZ

Con sus pasamontañas y sus llamativos vestidos tradicionales, hicieron su entrada en los edificios donde debía darse el Encuentro en presencia de unos 300 observadores y de más de 200 periodistas y fotógrafos. Entre el 20 y 22 de noviembre de 1998, más de 3.000 ciudadanos y representantes de distintas organizaciones mexicanas se reunieron en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, con una delegación zapatista conformada por 29 personas.

 

Llegaron en convoyes especiales desde tres de los principales bastiones zapatistas bajo la protección de la Cruz Roja Internacional, miembros de la Sociedad Civil (grupos de ciudadanos organizados fuera de las estructuras del gobierno) y representantes del Congreso. Luego, durante la totalidad del evento, de día y de noche, un 'cinturón de paz' integrado por cientos de voluntarios apoyó la seguridad de la delegación zapatista.

 

En la agenda del Encuentro entre el EZLN (Ejército Zapatista de la Liberación Nacional) - que, en enero de 1994, se levantó en armas contra el gobierno federal mexicano - y representantes de la Sociedad Civil se encontraban la preparación de la consulta nacional sobre la iniciativa de Ley de Derechos y Cultura Indígena y la búsqueda de posibles soluciones no violentas al conflicto chiapaneco. Además los zapatistas debían reunirse con la Comisión de Concordia y Pacificación (COCOPA), para ver más específicamente como reactivar el proceso de diálogo para la paz entre los rebeldes y el gobierno mexicano que se encuentra suspendido desde hace más de dos años. La COCOPA está integrada por representantes de todos los partidos del Congreso y diseñada para coayudar en la resolución del conflicto.

 

Este Encuentro constituyó una muestra de la sensibilidad, del grado de conciencia y madurez del pueblo mexicano por un cambio democrático así como el deseo de una convivencia plural y pacífica. Ilustra el vigor de la reflexión de Carlos Montemayor : ”El gobierno cometería un error de fatales consecuencias si ignora, reduce o busca eliminar los contenidos sociales de ese movimiento (zapatista) para atacar únicamente al núcleo armado mediante una estrategía militar.” 

 

Después de 5 años de un conflicto que se ve sin soluciones a corto plazo, la situación sigue siendo muy tensa por las divisiones en las comunidades y el empeoramiento de las condiciones económicas del país que constituyeron una de las mayores razones para el levantamiento armado.

 

La situación sigue siendo muy tensa

 

A casi un año de la masacre de Acteal, ignominia en la cual 45 desplazados indígenas fueron asesinados por paramilitares vinculados al partido en el poder, las cosas no han mejorado. Al contrario, la estrategía gubernamental triunfante ha sido la de línea dura. La presencia militar en las comunidades indígenas ha aumentado significativamente y el gobierno ha intensificado su presión sobre los municipios autónomos al desmantelar algunos de ellos a través de 'operativos' policiaco-militares masivos y encarcelando a sus autoridades. En uno de esos 'operativos' (El Bosque), ocho zapatistas y dos policías murieron. Además, parece que hasta la fecha, nada efectivo se ha hecho en contra de los por lo menos 12 grupos paramilitares que actúan en el estado, lo cual parece indicar una falta de voluntad política en crear condiciones de distensión. A menudo, la respuesta gubernamental sólo ha sido un paquete de medidas legislativas que por haber sido impulsadas unilateralmente vienen a enconar más las posiciones en el conflicto por lo que se vislumbran inoperantes. Hay por ejemplo una Ley sobre Remunicipalización y otra para el desarme de grupos civiles. 

 

Cabe recordar que el diálogo entre el EZLN y el gobierno federal se suspendió en septiembre de 1996. Para reanudarlo, los zapatistas exigían el cumplimiento de cinco condiciones mínimas. Entre ellas se encuentran una distensión militar en todo el estado, la liberación de los presos políticos y el cumplimiento de los Acuerdos de San Andrés sobre Derechos y Cultura Indígenas firmados en febrero de 1996. El gobierno federal se negó a incluir los cambios constitucionales que dichos acuerdos significarían bajo el formato consensado en el interior de la COCOPA y propuso al Congreso otra iniciativa de ley en marzo de 1998. Según especialistas, la propuesta gubernamental difiere significativamente de la que elaboró la COCOPA, la cuál tenía el visto bueno de los zapatistas.

 

Cinco condiciones mínimas

 

El reciente encuentro entre los zapatistas y la Sociedad Civil apuntaba justamente a la organización de una consulta a nivel nacional sobre esta propuesta de la COCOPA para obligar al gobierno mexicano a aceptarla, aunque no existen mecanismos constitucionales de iniciativa legislativa popular.

 

En el Encuentro, los comandantes zapatistas anunciaron que tienen dispuestos a 5.000 zapatistas, 2.500 mujeres y 2.500 hombres para visitar todos los municipios del país y así promover dicha consulta. Su preparación tomará por lo menos tres meses. Los zapatistas se comprometieron a dar todos los detalles sobre su ejecución en las próximas semanas, teniendo en cuenta todas las propuestas que salieron de las mesas de trabajo en forma de ponencias y comunicados durante el Encuentro. Los representantes de la sociedad civil mexicana abogaron para que se cumplieran las cinco condiciones planteadas por el EZLN y anunciaron que iban a colaborar para que se realizara la consulta. 

 

Las pláticas con la COCOPA casi dos años después de su último encuentro se dieron paralelamente. La delegación zapatista volvió a decir que el gobierno tiene que cumplir las cinco condiciones planteadas en 1996 para que se reanudara el diálogo. Tanto la COCOPA como la delegación rebelde pública se pronunciaron públicamente por una salida negociada al conflicto y por restablecer una mediación entre el EZLN y el gobierno mexicano. Los Zapatistas pusieron todas sus esperanzas en la consulta y en la movilización que podría generar para llegar a una solución pacífica al conflicto. No obstante, algunos analistas expresaron sus preocupaciones en cuanto a la viabilidad y los riesgos de dicha iniciativa. El gobierno federal siempre estará a tiempo de decir nuevamente que sólo se trata de la opinión de unos pocos y que no representa a la sociedad mexicana en su totalidad.

 

El factor clave: la Sociedad Civil

 

En el Encuentro entre el EZLN y la Sociedad Civil se notó que ésta última ha madurado y que ahora se ve como un actor más independiente e incluso crítico del EZLN. El reto es que se produzca un movimiento de masas. Desafortunadamente la crisis económica que golpea a muchas familias les lleva a preocuparse antes que todo de su propia sobrevivencia. Por otra parte, de ser aceptada la propuesta de Presupuesto federal para 1999, se elevará el precio de la gasolina y el IVA (impuesto sobre el valor añadido) y supondrá una reducción de las ayudas sobre productos alimenticios, lo cual probablemente generará descontento y movilizaciones masivas. Quedará por ver si dichas movilizaciones se extenderán en 1999 a otros campos como lo democracia y la justicia, como lo están pidiendo los zapatistas. 

 

Nuevamente, ya sea a través de la consulta que contribuiría a organizar o de su labor de denuncia tanto a nivel nacional como internacional, la Sociedad Civil parecería ser el factor clave que podría forzar pacíficamente a los actores políticos a retomar la responsabilidad de resolver el conflicto chiapaneco y a cambiar la estrategia de militarización.

 

SIPAZ (Servicio Internacional para la Paz) es una coalición creciente de 45 organizaciones de Estados Unidos, América Latina y Europa (entre ellos PBI, CPT, W4P, Pax Cristi) que buscan apoyar una paz digna, justa y duradera en Chiapas. Mantiene un equipo internacional de 6 miembros en Chiapas. SIPAZ sirve como recurso objetivo y creíble de información y análisis sobre el conflicto y el proceso de paz, ofrece oportunidades para la discusión y reflexión a través de talleres sobre resolución de conflictos y no violencia y apoya esfuerzos de reconciliación. Para recibir los informes trimestrales y Acciones Urgentes, por favor contactar:

 

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